dissabte 26 abril 2025
Conquistas del pasado, derechos del presente

Teatro Monumental. Calle de Atocha, 65. 
Madrid
26 de abril de 2025. 12:00 horas 
Comunidad de Madrid

Acto conducido por Héctor de Miguel y Marina Lobo
Con las actuaciones de Paco Ibáñez, Zahara y el dúo cómico ALPILPIL
Emisión en streaming a través de este enlace.

Durante el franquismo, miles de trabajadoras y trabajadores alzaron la voz en fábricas, minas, oficinas y barrios enfrentándose a la represión, los despidos, la tortura, la cárcel y asesinatos. En una época marcada por la ausencia de libertades, hombres y mujeres se organizaron en la clandestinidad y, con valentía y dignidad, se agruparon para emprender una lucha obrera, democrática y transformadora que denunciaba las condiciones laborales injustas, promovía la solidaridad entre sectores y comunidades, y articulaba una resistencia que fue mucho más que laboral: fue también democrática, feminista y profundamente transformadora.

Aquellas huelgas, detenciones, despidos y represalias fueron clave para abrir las primeras grietas en el régimen y forjaron una cultura de lucha que sembró las bases de las libertades y derechos que hoy disfrutamos. Reivindicar hoy esa memoria, esas conquistas, es una necesidad del presente. Los derechos laborales que hoy damos por sentados, como la negociación colectiva, la libertad sindical, la jornada de 8 horas o la protección social no nacieron solos: fueron logrados con el esfuerzo, el sacrificio y la solidaridad de miles de personas que arriesgaron sus vidas. Reconocer a quienes hicieron posible esa herencia es un acto de justicia y de responsabilidad democrática. Solo entendiendo de dónde vienen nuestros derechos seremos capaces de defenderlos frente a cualquier amenaza. La historia del movimiento obrero no pertenece al pasado: es la llave para construir un futuro más justo, más igualitario y más libre.

Es precisamente esa lucha de los trabajadores y trabajadoras la que está en la base de la recuperación de nuestra democracia, una lucha que ha logrado avances decisivos de la mano del diálogo social, y que cristaliza en la estabilidad en el empleo, en esa reducción de jornada que estamos cerca de conseguir o en la subida sin precedentes del SMI. Porque las luchas de ayer nos inspiran y empujan; porque las conquistas del pasado, son los derechos del presente.